¿EN QUÉ ESTAMOS CONVIRTIENDO ESTO? (Crónica 19º San Isidro 2013)

NOVILLADA PARA EL ARRASTRE.

Madrid. Plaza de toros de Las Ventas.

Feria de San Isidro 2013. 19º de abono.

Novillos de Carmen Segovia para:

·         Tomas Campos: silencio tras aviso y silencio.

·         Curro de la Casa: palmas tras aviso y silencio tras dos avisos.

·         Sebastian Ritter: silencio y saludos tras aviso.

Entrada: más de media plaza.              

Los novillos de Carmen Segovia:

·         Primero. “Soñoliente” Nº 31, Negro de 472 kilos.

(Flojo soso y nobletón) SILENCIO

·         Segundo. “Charrito” Nº 8 Negro de 460 kilos.

(Mal presentado, encastado y embestidor por bajo) PALMAS

·         Tercero. “Protestón” Nº 17 Negro de 457 kilos.

(Manso, descastado, flojo y a menos) SILENCIO

·         Cuarto. “ Capitán” Nº 23 Negro de 513 kilos.

(Noble y con opciones. Sin torear) SILENCIO

·         Quinto. “Dormidito” Nº 14 Negro de 515 kilos.

(Descastado, flojo y sin emoción alguna) SILENCIO

·         Sexto. “Divertido” Nº 30 negro de 510 kilos.

(Manso, rajado, sin fondo y descastadísimo) PITOS

Aguacero el que cayó en la capital minutos antes de que comenzara esa temible y aburrida novillada de Carmen Segovia. Un tedio absoluto que cansó a diestro y siniestro, por falta de oficio en los novilleros y por una ausencia de casta absoluta en los animales.

Una novillada bajita de presentación, subiendo el listón en los tres últimos, que blandeó desde el caballo y mostró las horas bajas que atraviesa la cabaña brava actual. Solo hace falta ver la condición de ese sexto novillo para ver la evolución del toro de lidia en España. Un bichejo asqueroso y somnoliente que se rajó y baboseó ante el encimismo de Ritter. ¿Desde cuando un toro de lidia recula y aguanta hasta “tobitas” de su matador? ¿Desde cuando un toro de lidia perdona cornadas y embestidas? ¿En qué estamos convirtiendo esto?

Tomas Campos volvió a demostrar que tiene técnica y cabeza, pecando de frialdad y cierta sosería. Suele componer muy bien sus muletazos, con la figura erguida y la mano baja, pero sin acabar de ceñirse a sus oponentes, algo que llegaría mucho más al aficionado. Tuvimos la sensación de que estuvo por debajo del nobletón cuarto.

Curro de la Casa tuvo el lote de más opciones en la corrida, a destacar el segundo. Muy mecanizado y destemplado lo vi. A tirones con el capote y a banderazos con la muleta, queriendo ligar siempre y olvidándose de la base del toreo, el temple. No me gustó y estuvo por debajo del lote.

Ritter se dio el arrimón con el sexto, esa babosa que os comenté arriba. Las ganas no le faltaron al chaval, que también realizó algún que otro quite variado y ambicioso. Enganchado con el tercero y encimista con ese sexto, calentando a los tendidos populistas de Madrid.

Vamos, que no pasó nada de nada.