lunes, 21 de abril de 2014

"SALVANDO LO IMPOSIBLE" (CRÓNICA DOMINGO RESURRECCIÓN MADRID 2014)






Vuelta al ruedo innecesaria de Nazaré para intentar tapar una mala corrida de Gavira.

Madrid. Plaza de toros de Las Ventas.
20 de Abril de 2014. 5ª de temporada.
Toros de Gavira para:
-      Curro Díaz: silencio tras aviso y silencio.
-      Morenito de Aranda: silencio tras aviso y silencio.
-      Antonio Nazaré: silencio y vuelta al ruedo.

Entrada: Un tercio largo de plaza.



Los toros de Gavira:
·         Primero. “Carabinero”, nº 65 Negro de 520 kilos. (Silencio)
(Muy serio, noble y a más en la muleta. Punto de casta)
·         Segundo. “Plañidero” nº 34, Negro de 532 kilos. (Silencio)
(Sin acabar de humillar, manseando y con movilidad. Sin dominar)
·         Tercero. “Destinado”, nº 37, Colorado de 530 kilos. (Pitos)
(Lesionado e inválido para la lidia. Noble y justo de casta)
·         Cuarto. “Jatero”, nº 100, Castaño de 544 kilos. (Silencio)
(Manso, rajado y con opciones en la muleta. Por momentos orientado)
·         Quinto. “Bohemio” nº 93, Negro de 535 kilos. (Silencio)
(Manso y descastado, deslucido y sin entrega)
·         Sexto. “Salpicón” nº 156, Negro de 522 kilos. (Palmas)
(Manso. Buen pitón y transmisión por el pitón izquierdo)



Tarde plomiza la del domingo de Resurrección en las Ventas de Madrid. Corrida desigual de presencia, cinqueña en su totalidad, bajita de triunfo y una terna que prometía más de lo que pudo o quiso dar.

Fue un encierro con leña por delante, seria en sus defensas, aunque dispares en colocación, igualada en peso, fuerte y para nada atacada de kilos. Una corrida con presencia suficiente para esta plaza, y sustituta de la anteriormente anunciada como Los Bayones, de encaste parcialmente lisardo, que al parecer quedó fuera de la tarde por falta de cara en sus pupilos. Antes que nada queremos mandar nuestro apoyo a una víctima más de las empresas poderosas e insensibles, por ello mandamos un abrazo y todo nuestro ánimo a Gerardo Ortega. Creo que sobran las palabras.

Echamos en falta también la actitud de los toreros que vienen a Madrid a comerse el mundo. Precisamente no van sobrados de contratos los anunciantes, aunque pareciera en directo tener firmado la campaña completa de 2014, al no poner el picante que les faltó a los de Gavira. Estuvo ausente la garra, el valor y la actitud torera que tanto gusta en esta plaza.

Abrió la plaza el tan querido por todos Curro Diaz, quien no tuvo su tarde. Se llevó el lote más serio y noble de la corrida, por codicia, movilidad, franqueza y ritmo, sustancia que le faltó al de Linares, adormilado durante toda la tarde, despertando por momentos como los grandes artistas, con pinceladas de oro al empiece de sus dos faenas, torero, sentido y cuajado, por bajo todos ellos, con el pecho por delante y domeñando las embestidas de los cornúpetas. Y eso fue todo lo que quiso o pudo hacer el andaluz, porque volvió a caer en su sueño profundo, para aburrirnos en tandas descompuestas y sin acople, con poco mando y nula limpieza, cerrando sus dos faenas con dos horrendos sartenazos, que a más de uno hizo despertar con algún que otro pito.

Morenito pasó totalmente inédito de Madrid. Es cierto que se llevó el lote más deslucido y malo de la tarde, pero ni siquiera pudimos ver su gran fuerte con el capote, ya que toda la corrida salió excesivamente abanta de chiqueros, buscando salidas y rehuyendo de los capotes. Apenas dos verónicas en su quite al primero, sin gran rotundidad y empaque. Lo demás fueron muletazos acelerados y poco mandados en sus dos toros, que embistieron a media altura y sin recorrido, con alguna que otra colada. La falta de poder fue más que vista por todos los asistentes, entrando a matar con los toros prácticamente crudos y poco picados. Ni siquiera pudimos disfrutar del gran Aranda con los palos, tras los desajustes y las dificultades que provocó el manso en su lidia. Volvímos a caer en un sueño profundo, esta vez acompañado de un terrible viento y un frio propio del mes de febrero.

Nazaré fue el tercero en discordia, sorteando un animal inválido y mantenido por el usía Cano, que empieza a llevarse las malas caras de los aficionados. Animal descarado de pitones, abierto de cuna y redondo como una pelota. Protestas por la falta de fuerzas y silencio de nuevo para seguir en la somnolencia. El sueño de nuevo se apoderaba de los tendidos, viendo como una y otra vez el animal pasaba sin un ápice de chispa por la franela sevillana de Antonio, tirando líneas y ayudando al animal en un recorrido cada vez más largo y pesado.
Llegó entonces el último, con la plaza aplomada, íbamos ya por el sexto sueño, una borrachera de frio y aburrimiento, y un animal corto de caja y con grandes defensas salía por chiqueros. Pareció tener más chispa y hasta quiso quedarse en el caballo. Comenzabamos a despertar entonces, cuando varios naturales retorcidos, y descargados provocaban los primeros “oles” de la tarde. Ahora me entraba el dilema, no sabía si seguía despierto o soñando. ¿Esto era Madrid? Volví a abrir los ojos y de nuevo vi un calco de la anterior, varios muletazos con la mano izquierda, que no naturales (eso de natural tenía poco), largos, arrastrados y en línea. Parecia que era real, el toreo “juliano” tomaba efecto y parecía apoderarse de Madrid. ¿Pasará lo mismo cuando venga el poderoso y admirado Julian Lopez? ¿A estos se lo pasamos y al Juli no? ¿Qué estaba pasando? ¿Qué me he perdido? Pues con todas y con esas tras una estocada algo desprendida van y le piden la oreja. ¿Madrid o Villaconejos de la Flora? El usía parecía haberse mantenido despierto durante toda la faena y contó bien los moqueros, para no conceder la oreja. La vuelta al ruedo, para mi nefasta, barata y regalada.

Y con esto cerrábamos el Domingo de Resurrección un año más en la plaza de toros de Las Ventas. Poco que contar y mucho que olvidar.

Un saludo
Borja González.


lunes, 14 de abril de 2014

LÓPEZ SIMÓN, TOREO DISTINTO. (Crónica Domingo de Ramos Las Ventas 2014)







Grave cornada a Jimenez Fortes con una corrida floja y descastada del Puerto.


Madrid. Plaza de toros de Las Ventas.
13 de Abril de 2014. 4ª de temporada.
Toros del Puerto de San Lorenzo y Ventana del Puerto (3º bis) para:
-       Jimenez Fortes: saludos con protestas (aviso) y silencio (aviso)
-       David Galván: división (TRES avisos) y silencio (aviso)
-       Lopez Simón: vuelta al ruedo tras petición (aviso) y saludos.

Entrada: Más de un cuarto de plaza.

Parte médico de Jiménez Fortes: "Herida por asta de toro en pliegue de glúteo derecho con trayectoria de 30 centimetros que contusiona recto, vejiga y uretra hasta cara posterior de sínfisis pubiana. intervenido en la enfermería, se traslada a la Clínica La Fraternidad. Pronóstico grave que le impide continuar la lidia. Firmado: Dr. García Padrós".

A destacar la lidia de Vicente Osuna, de la cuadrilla de López Simón.

Los toros del Puerto de San Lorenzo y Ventana del Puerto (3º sobrero):

·         Primero. “Cubanoso” Nº 79, Negro de 574 kilos. (División)
(Manso, noble y sin entrega en la muleta. Mucha movilidad)
·         Segundo. “Cardilisto” Nº 147, Negro de 565 kilos (Pitos)
(Justito de presencia, muy manso y rajado. El peor de la tarde)
·         Tercero. “Resistentito”, Nº 28, Colorado de 616 kilos. (Silencio)
(Noble y de gran clase, aunque muy justo de fuerzas. Mucho peso)
·         Cuarto. “ Lechucita” , Nº 159, Negro de 619 kilos. (Silencio)
(Sin picar. Manso, parado y descastado. Noble y sin transmisión)
·         Quinto. “Argel”, Nº 82, Negro de 550 kilos (Silencio)
(Sin picar. Manso, flojo y noble en la muleta. Se vino arriba)
·         Sexto. “ Ventisquito” Nº 128, Negro de 596 kilos. (Palmas)
(Sin picar, flojo y muy noble para la muleta)



Primer festejo mayor de la temporada con una tarde perfecta para el buen toreo. Más de 27 grados en la capital y una entrada potable para los tiempos que corren. Mucho “guiri” en los tendidos y seguidores de toreros en busca de triunfo. Los aficionados nos encontrábamos seguramente en minoría, aunque nos hiciésemos notar en varios momentos del festejo.

Y ya en la primera debemos apuntar un nombre en nuestra pequeña libreta, Alberto López Simón, nacido en Barajas y discípulo de Jose Luis Maganto. Toreo con personalidad propia, que no plagiada, lleno de ganas y con las ideas claras en su futuro. Hoy sabemos que le apoderará el tan querido Matilla, por lo que esperamos que su rumbo no se tuerza por otros mentideros, y que siga con sus ideas claras.

Puede parecer, por lo que veo en los portales, que Alberto pudo cortar tres orejas ni más ni menos en la capital hispana. A mi que me expliquen qué narices vieron, o en qué momento perdí el hilo de la corrida. Un encierro por cierto que vuelve a decepcionar una vez más. Y es que estamos cansados de soportar tres tardes, año tras año, a los lisardo-atanasios del Puerto de San Lorenzo. ¿Qué hemos hecho para merecernos esto, señor? ¿Acaso no hay ganaderías por España que hay que repetir TRES veces en una misma temporada, a una vacada que no deja de tener altibajos?

Fue un encierro desigual de presentación, con mucho peso y leña por delante, algo escurrida en algunos bureles por culata, defecto que siempre se acentúa en esta casa. Manseó como regla generalizada, y se caracterizó en su conjunto por la falta de fuerzas. Que den gracias al presidente y el nulo tercio de varas, porque sino más de tres toros deberían haber desfilado a corrales, con pañuelo verde.


Jimenez Fortes abrió el cartel con el deseo de verle tras su buena actuación en Valencia. A mi personalmente no me dijo nada en toda la tarde, le vi acelerado y superado por la presión con la que quizás venía tras las Fallas, donde dejó el listón bastante alto. Sus faenas fueron largas y monótonas, de muchos muletazos, pero ninguno de verdad, sin reacción alguna por parte de los tendidos.

No acabó de acoplarse a su primero, un animal muy cuajado que no paró de moverse y embestir, sin emplearse y a media altura, con poca gracia y entrega. Pero es cierto que pudo hacer algo más con él, como pararse, mandar y romperse por bajo. La faena se quedó muy a medias y tuvo que tirar de repertorio valiente para subir el ánimo de la gente. Varias manoletinas y saludos con varias protestas.

Su segundo toro fue el de más peso de la corrida. Grandón, aunque bien proporcionado, manso y dejándose de nuevo en la muleta. Y la faena fue un calco de la anterior. El animal se movía bastante, con más entrega que el primero, y Fortes ligó y ligó muletazos sin sentido, ceñidos pero sin decir nada.
Su actuación no quedó ahí, y se echó el capote a la espalda para quitar por gaoneras al sexto de la tarde. La mala suerte se cebó con el malagueño, que tras un tropiezo con el cornúpeta fue prendido por el glúteo de malas maneras. Esperamos su recuperación.


David Galván se fue con un mal sabor de boca tras escuchar los tres avisos en su primer toro. Un auténtico desastre que se veía venir desde el primer momento. Es inconcebible las faenas tan sumamente largas que se acostumbran a hacer en la actualidad. Llevamos cuatro festejos en la temporada y en todas las semanas han perdonado el tercer aviso. Hoy ya no se podía arreglar el desastre y el segundo de la tarde tuvo que ser apuntillado en tablas del 4. ¿Qué pintan los apoderados o consejeros de estos chavales? Me pregunto yo.
No tuvo su día y posiblemente le condicionó también en su segundo toro. Debe mejorar una barbaridad la espada y medir mucho más sus faenas. Las formas no son malas, e intenta bajar mucho la mano y llevarlos detrás de la cadera, con un concepto del muletazo muy en redondo, algo que gana puntos. Ánimo y para delante, que hasta los más grandes tienen tres avisos en su historial.


Cerramos con el mejor de la tarde sin ninguna duda, Alberto López Simón.
Dos faenas muy serias, que llegaron pronto al tendido, con un toreo vertical, algo picotero, pero sentido y con personalidad, con varios muletazos por bajo muy buenos y toreados.
Su primero fue devuelto a corrales tras su falta de fuerzas. En su lugar salió un gigantón de la Ventana del Puerto, con una embestida franca y realmente buena por ambos pitones, muy bien lidiado por Vicente Osuna. Buen recibo capotero de salida y brindis a sus compañeros. Fue esta una faena de altibajos, debido en parte a las irregularidades del cornúpeta. Subió el tono con varios naturales muy mandones ya en el tercio del “7”, buscando el pitón contrario y rematando las series con monumentales trincheras, ceñidas y templadas. Estocadón perfecto y petición algo excesiva de oreja. La vuelta al ruedo fue reconocida por todos.

 Cerró la tarde con un toro muy serio y ofensivo del Puerto, que flojeó y de qué manera tras sus dos minipuyazos. Alberto tiró de técnica y perdió pasos en las primeras tandas, para dar aire al lisardo, que acometía con nobleza extrema a las telas del madrileño. Encontró entonces su sitio Simón y le pegó dos buenos derechazos por bajo, algo en línea y con la parte externa de la muleta, ligado con un templado pase de pecho. Fue en la siguiente tanda cuando empezó a rugir Madrid, cuando relajó la figura y metió riñones, con un toreo vertical y de mano baja, sin codillear ni retorcerse como está de moda. Soberbio el derechazo largo y hondo de la tercera y cambio a la mano izquierda, donde “Ventisquito” llegaba muy apurado a final de muletazo. Hizo bien en ir a por la espada, aunque estaba vez no atinara, perdiendo así una posible oreja, en reconocimiento de una tarde buena.


Esto fue todo lo que sucedió en la primera corrida de la temporada en Las Ventas. Una corrida muy justa de todo y tres jóvenes toreros que debieron arrear más. Creo que todos nos esperábamos un poco más de la tarde.

El domingo nos volvemos a ver con un interesantísimo cartel. Curro Diaz, Morenito de Aranda y Antonio Nazaré, que lidiarán una corrida de Los Bayones, los cuales deben borrar la mala imagen del año anterior.

Un saludo
Borja González


martes, 8 de abril de 2014

VICENTE SOLER, GRATA PRESENTACIÓN (Crónica 6 de Abril 2014)






Oreja excesiva para Vicente Soler tras una vibrante faena en los medios al gran quinto novillo.

 

Madrid. Plaza de toros de Las Ventas.
6 de Abril de 2014. 3ª de temporada.
Novillos de Los Chospes para:
-      Borja Álvarez: palmas y silencio tras dos avisos.
-      Vicente Soler: silencio y OREJA con leves protestas.
-      David González: silencio tras aviso y silencio tras dos avisos.

Entrada: Un tercio de plaza.
Palmas para “El Patillas”, picador de Vicente Soler.


Los novillos de Los Chospes:
·         Primero. “Merengue”, Nº 37, Castaño de 490 kilos. (Palmas)
(Noble, boyante y con abundante clase. Sin aprovechar)
·         Segundo. “Criado”, Nº 38, Negro listón de 485 kilos. (Pitos)
(Manso, deslucido y con peligro sordo en la muleta. Muy orientado)
·         Tercero. “Largapuya”, Nº 50, Negro chorreado de 482 kilos (Silencio)
(Manso, rajado y muy castigado en varas. Parado en la muleta y a menos)
·         Cuarto. “Cocinero”, Nº 59, Negro listón de 480 kilos. (Palmas)
(Manso, con un punto de casta, noble, humillador y con mucho recorrido)
·         Quinto. “Rabanito”, Nº 26, Negro de 482 kilos. (Fuerte ovación)
(Buen novillo. Encastado que no bravo, noble y con transmisión)
·         Sexto. “Acuchillado”, Nº 35, Negro de 510 kilos. (Silencio)
(Feo y mal presentado, simplón y falto de casta. Nunca se entregó)

 

Salimos con otras sensaciones de la plaza en la tercera de temporada. Nadie daba un duro por esta novillada y a priori ha sido la más interesante y completa de las que llevamos hasta ahora. Sin tirar cohetes, ni mucho menos, hemos de reconocer que la novillada ha valido para el triunfo de los coletas. Sacar tres novillos en Madrid con posibilidades de triunfo ya lo quisieran muchos, y el domingo los Chospes así lo hicieron.

Sin ser un encierro completo ni bravo, resultó noble y toreable, muy bueno para los jóvenes novilleros, que aún así lo desaprovecharon, y suficiente para la afición más exigente de la capital, ya que mostraron fortaleza y movilidad.

 

Sin duda la sorpresa saltó en el quinto de la tarde, con una faena bastante buena del joven Vicente Soler. Cabeza, mando, temple y técnica más que suficiente para su edad. En los mismos medios, ante el mejor novillo de la tarde, con dos leños por delante y con serio comportamiento de cuatreño. Dos primeras tandas de derechazos, largos y profundos, algo en línea, pero tirando bien del bicho. Mejor aún al natural, donde molestó el viento, con uno de ellos soberbio, rematado más allá de la cadera. Vinieron entonces algún que otro “retorcimiento juliano”, acompañado de alguna voz exigiéndole figura erguida. Y de nuevo dos naturales encajados, ceñidos y mandones, con un sobresaliente pase de pecho. Varios detalles finales por bajo y un pinchazo caido. Tronaba la ovación del público, muy metido en la faena, apoyando y aprobando la actuación del toricantano. La posterior estocada rinconera quitó méritos a la que sin duda ha sido la mejor faena de novillero en el último año.

Y es que vuelvo a tener claro que para valorar una faena tenemos que utilizar el doble rasero. Primeramente debemos ver si el torero ha estado bien o mal, por encima o por debajo del animal, y luego ya opinar si nos ha gustado o no la manera de torear que ha tenido. Entrando a valorar esa personalidad o torería tan escasa en los últimos años.
En la primera fase debemos tener en cuenta el poder, mando y temple con respecto al burel. Y debe ser una parte objetiva, clara y firme. Luego ya catalogaremos si nos ha gustado o nos ha llenado su toreo, entrando ahí al gusto personal de cada uno.

 
Y Vicente Soler ayer estuvo BIEN. ¿Qué no llega a los tendidos? Vale ¿Qué no dice nada su muletazo? BUENO ¿Qué se retuerce un poco más de la cuenta? PUEDE… Pero ayer ese chaval de 18 años estuvo hecho un tio y estructuró la faena y los tiempos de forma perfecta. Asustó la firmeza con la que dio distancia al de Los Chospes, la limpieza de su faena y el muñequeo en algunos muletazos. Puedo decir alto y claro que a mi sí que me gustó el de Burriana.

 
Al igual que aborrecí a mi tocayo Borja Álvarez, con todos mis respetos. ¿Qué quieren para torear? Lote desaprovechado de puerta grande el que se llevó Álvarez, y no por falta de ganas. Hasta dos veces se fue rodilla en tierra a porta gayola e intentó agradar al público con varios quites y aburridos redondos por la espalda. Debe ser que no ha visto mucho las reacciones y el gusto de Madrid, la cual detesta por encima de todo el toreo populista y barato, basado en las cercanías y pocas ventajas del toro, cuando no se han aprovechado las embestidas francas de un cornúpeta.

El castaño que abrió tarde fue el bombón que destapaba la caja domecq. Blandito de salida, noble y bobo al perdonarle un cornalón en los mismos chiqueros, y boyante cual carretón en la muleta. Un gusto para los paladares toreristas que fue creciéndose poco a poco ante el nulo mando del alicantino. Humillado, planeando y galopando cual perro detrás de una pelota, sin una mala mirada y con un temple exquisito para liarla gorda. Borja se empeñó en muletear en línea y sin gracia, acortando las distancias y buscando el asombro del público con varios arrimones innecesarios. Horrible vaya.


Y otra oportunidad tuvo en el cuarto. Animal rajado y manso, cabezón y de cuello largo, el cual descolgó en el último tercio, para irse largo y profundo por ambos pitones. Ese tranco de más que tiene el manso que logra quedarse fijo en la muleta para repetir hasta la saciedad. Ese tranco de más que tantos triunfos ha dado en la tauromaquia. Esa embestida por fuera y sin atropellos que todo torero desea en una plaza como Las Ventas. De nuevo acortó las distancias para no verse desbordado y destrozó otro lio gordo en la capital. La afición se dio cuenta y recriminó con pitos las cortas distancias desde la que citaba el joven levantino. Palmas inmerecidas por manso y algún que otro pito ganado a pulso para Borja.

 
Cerraba el cartel el madrileño David González. Joven iluso y mal llevado por sus tutores, estrellándole por completo en una presentación más que precipitada.
No dijo absolutamente nada nuevo en toda la tarde y a punto estuvo de llevarse el disgusto con el sexto, rozando el tercer aviso tras verse sin recursos para acabar con él. Su lote pudo ser el más insulso de la tarde.

Anotar por último que Soler entra en la novillada planificada para el día 27 de abril, con la ganadería esperada de Javier Molina.

Y este domingo tendrá lugar la primera corrida de toros de la temporada 2014. Recordamos el cartel: Toros del Puerto de San Lorenzo para Jimenez Fortes, López Simón y David Galván.

 

Un saludo

Borja González

 

martes, 1 de abril de 2014

UN DEBUT Y UN NUEVO FRACASO GANADERO (Crónica 30 Marzo 2014. Madrid)






Foto: www.las-ventas.com


Floja y descasta novillada de Jose Luis Pereda en la segunda de temporada.


Madrid. Plaza de toros de Las Ventas.
30 de Marzo de 2014. 2ª de Temporada.
Novillos de José Luis Pereda y La Dehesilla (5º y 6º) para:
-       Jesús Fernández: palmas y palmas tras aviso.
-       Juan Ortega: silencio tras dos avisos y palmas.
-       Tomás Campos: silencio tras dos avisos y silencio tras aviso.
Entrada: menos de un cuarto de plaza.

Aplaudidos los picadores Juan Pablo Molina (cuadrilla de Ortega) y Pedro Geniz (Tomás Campos), por sus buenos puyazos a segundo y tercer novillo.


Los novillos de Pereda:
·         Primero. “Billetero” Nº 93, Castaño salpicado de 463 kilos. (Leves palmas)
(Noble y embestidor en la muleta, algo reservón y con posibilidades de triunfo)
·         Segundo. “Cristalero” Nº 116, Negro listón de 472 kilos. (Palmas)
(Noble y boyante, con cierta casta y entrega en la muleta)
·         Tercero. “Banderillero” Nº 62, Negro listón bragado meano de 472 kilos (Silencio)
(Mucha movilidad y fuerza en primeros tercios. Manso y rajado se vino abajo)
·         Cuarto. “Paleto” Nº 12, Negro listón bragado meano de 467 kilos (Silencio)
(Muy parado y falto de casta, tampoco sobrado de fuerzas)
·         Quinto. “Charco” Nº 143, Negro listón de 473 kilos (Pitos)
(Manso y descastado, sin entrega alguna en ningún tercio)
·         Sexto. “Calzonero” Nº 142, Negro bragado listón axiblanco de 522 kilos (Pitos)
(Impresentable e inválido, debió ser devuelto por la presidencia)


Mal estreno del usía Javier Cano en la presidencia de nuestra plaza querida. Otro “entendido” que nos cuelan con calzador incluido como auténtico defensor de la fiesta. Así permitió al inválido sexto el privilegio de ser arrastrado por el ruedo de las mismísimas Ventas, cuando ni por presencia debió saltar al ruedo madrileño.

No solo dio el cante en el cierre del festejo, sino que ya en el tercero de la tarde perdonó los tres avisos al extremeño Tomás Campos, emperrado en cuajar una faena que sabíamos no iba a subir de tono. Maneras de cumplir el reglamento cuando les viene en gana.

Y es que de primeras no debió aprobar a ese horrendo sexto, ni por cara ni por malformación genealógica como lo llaman algunos. Novillada aceptable de presentación y cerradita de pitones, para el gusto de los taurinos. Embestidora en su primera mitad y descastada y mansa a rabiar en los tres que cerraron el festejo. Un encierro deslucido en su conjunto, que sigue obteniendo el premio de repetir año tras año en una plaza de máxima categoría como es Madrid. Bien es sabido por todos la relación tan buena que debe tener Taurodelta con el ganadero, porque sino es inexplicable que nos cuelen dobletes y tripletes de este hierro todos los míseros años.

Y volvieron a repetir también al ya habitual Jesús Fernández, catalán de nacimiento y con vocación torera, para enfado de algunos. Novillero entrado en edad, con  seis años de trayectoria con picadores, con oficio pero sin proyección para un futuro más que turbio. Otro que debe tener buenas relaciones con los Chopera ya que al igual que la ganadería nos lo repiten año tras año (dobletes en 2011, 2012 y 2013, camino del 2014, sino al tiempo). Y es que es un torero que da la cara siempre, que rara es la vez que no sale con un muslo abierto, y que por tanto merece todos mis respetos. Y las cosas como son, esta vez es la mejor que le he visto en Las Ventas. Faltó rodaje y cierta técnica pero logró, para mi, los dos mejores naturales que llevamos de campaña (aunque sea poco).

Esa falta de técnica hizo que de nuevo fuera prendido por el noble novillo, que retranqueó en sus embestidas, y se desplazó de maravilla cuando de verdad le llevaron embebido en la muleta. Saludó desde el callejón la ovación del público.

Con el cuarto solo pudo mostrar valor y ganas de llegar a los tendidos. Fue un animal muy parado, soso y descastado, que perdonó de nuevo la cornada al de Llobregat. Pinchó y todo quedó en silencio.

Juan Ortega volvía a Madrid tras su hecatombe con el bravo novillo del Ventorrillo, del que por lo menos el aquí presente sigue recordando. Realizó una faena más pintoresca que torera a su primer oponente, el de más opciones por raza y codicia de la novillada. La prueba del poco poder que tiene el sevillano en la muleta la pudimos ver en los terrenos que se realizó la faena, empezando en la Puerta Grande de Madrid y acabando más allá del palco real. Un sinfín de muletazos, irregulares, sin mando y con abundantes pasos en falso. Es cierto que compuso bien muchos de ellos y logró sacar algún natural encajado y vertical, lo que es de agradecer. El fallo estrepitoso con los aceros emborronó más aún la faena de altibajos de Ortega. Debe mejorar una barbaridad la ejecución de la suerte suprema. Dos avisos y silencio a su larga faena.

El quinto fue un marrajo que no mereció una lidia mejor de la dada. Manso, rajado y sin entrega ni codicia. No atendió a ningún cite y acabó parándose en la muleta. La virtud del diestro fue el ir metiendo poco a poco en el saco al novillo, aunque no tuvo lucimiento alguno. Alargó la faena y recibió palmas tras un feo bajonazo.

Cerraba el cartel el pupilo de Rivera Ordoñez, al que no pareció verse por el callejón (o yo al menos). Tomás Campos venía fuerte y con cartel tras sus buenas sensaciones dejadas el año pasado en la capital. Se topó sin duda con el lote más imposible de la tarde.

El primero por manso, rajado y descastado. Y eso que embistió con fuerza y rectitud al caballo de Pedro Geniz, que las pasó verdaderamente mal en la primera arrancada. Engañó al personal en los primeros tercios, pero cantó la gallina en la primera tanda por la diestra, tras brindar al cielo. Con él se fue hasta el tendido del 4, para intentar robarle muletazos sin que éste pegara la huida hacia el más allá, todo ello a media altura, sin obligarlo ni poderlo del todo, para así aguantar con él. Fue tan larga la faena que a punto estuvo de escuchar el tercer aviso, amén que el debutante debió cagarse por las patas abajo. ¿Cómo un presidente iba a devolver a un pobre chaval un toro en su primer día de trabajo? La seriedad de la fiesta vaya.

Y en sexto lugar le salió el animal de la discordia y enfado. Cerradito de cara, estrecho de pechos y atacado de peso por detrás, sin remate y lastimado de los cuartos traseros. Un animalito que no debió saltar al ruedo ni pasar el reconocimiento. Como era obvio la plaza se puso en contra, más aún cuando vio que no andaba sobrado de fuerzas. Como estamos en Madrid la faena careció de argumentos y la gente pidió a gritos el arrastre de mulillas. Silencio y leves pitos en el arrastre.

Y esto fue todo de otra desastrosa novillada en Madrid, y van dos.

Cartel barato, ganadería que tiene fijo su puesto en 2015 y quién sabe si una tercera tarde tras la corrida de San Isidro y todos tan contentos.
El domingo vuelven Los Chospes para tres debutantes. Encerrona asegurada vaya.

Un saludo

Borja González.