4ª de Feria. Fallas 2013.
Toros de Adolfo Martín
para:
·
Antonio Ferrera: silencio
en ambos.
·
Eduardo Gallo: saludos y
silencio.
·
David Esteve: vuelta al
ruedo tras leve petición y silencio.
Entrada: Un cuarto.
Corrida
entretenida aunque por debajo de lo esperado de Adolfo Martín protagonizada
claramente por un SEÑOR TORO de nombre “Aviador”
herrado con el número 9 de 521 kilos con casi seis años a sus espaldas.
Cornúpeta completo que mereció otro oponente para así poderse ganar el respeto
que injustamente ha tenido en el día de hoy. Animal que mereció el pañuelo azul
por parte de la presidencia, por su humillación en el capote, su fijeza y
empuje en varas y su acometividad, clase y desplazamiento en la muleta. Un “adolfo”
de bandera que claramente optará a los premios falleros.
Y
es que es de agradecer ver una corrida cinqueña con semejante presencia. Trapío
suficiente y notable para una feria como la de fallas, visto lo que se lidiará
en días posteriores en el mismo ruedo.
La
corrida salió con chispa de salida, se dejó y tuvo buena condición en el
capote, y en líneas generales, aun faltándoles cierto poder, se emplearon bien
en el caballo, metiendo riñones, con fijeza y cara abajo. Exceptuaremos de este
conjunto al cuarto de la tarde, que manseó y tuvo excesiva sosería. El fallo
principal de la corrida fue que no rompió en la muleta, siempre quedándose a
medio muletazo, buscando en ocasiones los tobillos, saliendo aireados y con la
cara por las nubes en otro y hasta blandeando de manos un par de ellos. No
salió convencido Adolfo de la plaza, quien manifestaba que solo el tercero
cumplió y con nota con lo esperado.
Asi
fueron los animales de Adolfo:
·
Primero: “Madroño” (Bien
presentado, cumpliendo en varas y orientado en la muleta) División.
·
Segundo: “Horquillono” (Lastimado o
descoordinado, sin romper y complicado) Silencio
·
Tercero: “Aviador” (Extraordinario
y merecedor de vuelta al ruedo. Completo, humillador y de clase impresionante.
Sin verlo) Ovación.
·
Cuarto: “Sombrerillo” (Peor de la
corrida. Manso y deslucido) Silencio
·
Quinto: “Aviador” (Complicado,
bajo de casta, sin romper nunca) Silencio
·
Sexto: “Aviador” (Ovacionado de
salida. Exigente aunque con sosería. Flojo) Pitos
En
cuanto a los matadores debemos destacar la sorpresa que me ha dado Ferrera, que nunca ha sido ni será de
mi gusto, pero que ha demostrado muchísimo oficio y un muy buen manejo como
lidiador con el capote. Horroroso con el tremendismo de las banderillas (hoy
todas le quedaron bajas) y menos acelerado de lo normal con la muleta, aunque
siempre perfilero y al hilo, algo que no benefició a estos albaserradas, que
piden todo lo contrario.
Con
su primero estuvo valiente después de que “madroño” cambiara de forma
brutal tras un quite poco beneficioso y muy “recortado” de Gallo por
chicuelinas. Debe ser que no se ha enterado el salmantino que los “adolfos” y
los circulares no son muy amigos. Ya puso las cosas claras el bicho en esa
acción y luego buscó pelea y batalla a un Ferrera con pies y seguro en sus
piernas, con la muleta siempre delantera y sabiendo lo que se hacía.
Se
inventó la faena al cuarto, “Sombrerillo” herrado con el número 54, sin duda el
peor de la corrida por manso y deslucido, y hasta sacó algún natural roto y
desmayado que llegaron a los tendidos. Estocada suelta y trasera que necesitó
de descabello.
Gallo tuvo sus dos caras. Serio
y firme con el primero, “Horquillano”,plantado, erguido, corriendo la
mano bien por ambos pitones y alargando la embestida del lastimado animal
cárdeno. “Horquillano” pudo haberse perjudicado tras un choque frontal y brusco
contra el burladero de matadores y este hecho pudo condicionar su lidia.
Entipado y humillador de salida, cumplió en varas para quedarse corto y
rebuscar en los tobillos del charro. Algunos naturales vimos destacables en
Eduardo que sigue apuntando pero no llegando. Pinchazo y estocada caída para
recibir palmas desde el frio tendido valenciano.
Otro
que no despegó fue el quinto de la tarde. Segundo “Aviador” de la
corrida, herrado con el 101 y de bonita y seria lámina. Avión que se estrelló
por completo en cuanto a condición, tras no pasar y quedarse a mitad de
muletazo con cierta sosería y baja casta. Dudó en esta ocasión el diestro,
encimista y sin creérselo, buscando una lidia vulgar y ordinaria y sin saber
coger recursos como anteriormente haría Ferrera para alargar y conducir la
embestida del bicho. El sartenazo infame tras cuatro pinchazos dan constancia
de que no estuvo metido en la faena.
Por
último de Esteve poco tenemos que
decir. Un torero que apenas se viste de luces dos veces al año y que tiene el
valor de enfrentarse a una corrida tan seria como la de Adolfo en Fallas tiene
todos mis respetos. Aún asi y siendo críticos debemos decir que ha estado muy
por debajo de su lote que fue el de mayores posibilidades.
Tuvo
el triunfo en la mano y su despegue, por qué no, en este mundo con ese
fantástico tercero que ya antes hemos descrito y eso que empezó sumamente bien
con el capote, templando, acompañando la bellísima embestida por bajo, ganando
terrenos y rematando con torería. Excesivos fueron los capotazos de su lidia y
desastroso su planteamiento de faena. Inicio poco prometedor, sabiendo que lo
que ahí tenía era un triunfo en toda regla. Ni se lo creyó ni nos lo creímos y
por ello la faena nunca cogió altos vuelos. Algún derechazo jaleado, más por la
humillación y planeo de ese “Aviador” que por la conjunción del pase.
Otra serie más de derechazos sin sentido y mano a la zocata para descomponerse
y verse podido por completo. La cosa estaba vista y la gente lo sabía. Pinchazo
y entera desprendida y petición por paisanaje. El toro como hemos dicho mereció
mucho más. Se fue sin torear. Vuelta al ruedo por la “face”.
Con
el sexto, tercer y último “Aviador”, vimos de nuevo otro recibo bastante
potable con el capote por parte de David después de escuchar la sonora ovación
que la gente le dio al animal nada más asomarse por chiqueros. “El ver que la
gente se pone de parte del toro ya de salida debe acojonar y mucho”.
Tuvo
clase el animal en el caballo, empujando muy fijo, con la cara abajo y apretando
(como casi todos sus hermanos). A este animal lo picó el gran Tito Sandoval que
se ganó la ovación tras mover de lujo al caballo, dar los pechos y tirar bien
de la pica, aunque ambos puyazos no cayeran en buen sitio. Esto para que se den
cuenta que la suerte de varas gusta cuando se hace bien. (Mañana esperemos ver
un verdadero espectáculo con los de Miura) En la muleta se vino abajo, demostrando
poco fondo y raza y fue ahogado por Esteve que pareció quitarse el marrón
cuanto antes. Nunca le pilló el sitio ni le buscó los terrenos idóneos.
Estocada caída y silencio con leves pitos al toro.
Mañana
espero una gran tarde con una corrida muy seria de Miura. Robleño, Castaño y
Rafaelillo seguro que nos alegran las fallas.
Foto: Aplausos.es
Un
saludo
Borja
González.
1 comentario:
Gran crónica si señor. Vi una corrida que tuvo mucho interés para el aficionado. Cuando vengan los perritoros echaremos de menos a más de uno de los que han salido hoy.
Presentación irreprochable de Adolfo Martín.
Seguir asi que lo haceis muy bien chicos!
Un abrazo fuerte desde Sevilla
Albert
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