Esta mañana nos levantabamos con la agradable noticia de la vuelta de Javier al ruedo venteño. Un puesto más que ganado y justificado, apoyado por la afición madrileña tras años de esfuerzo novilleril y con ese buen resultado que nos dejó en la pasada feria de San Isidro.
Tal vez este puesto tuvo que haber sido en fechas mas tempranas y cercanas a la feria. De hecho me arriesgo diciendo que merecía una de las tantas sustituciones que se han dado en el ciclo.
No deliramos si decimos y apostamos por Javier como uno de los principales candidatos a llegar alto en este mundo. Personalidad, mano baja, temple, buena mazo izquierda, sometimiento, poder y ganas. ¿Qué mas puede pedir un chaval que es novato en esto?
No podemos acabar sin decir y publicar bien alto el compromiso que tiene en Azpeitia en el mes de agosto ante una corrida de palha. ¿Alguien se imagina lo que puede pasar si este madrileño le corre la mano a un palha?
Un saludo
Casta y bravura
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