En el mes de junio de 2009, dos chavales que se conocieron a través del Foro el Albero, dieron el pistoletazo de salida a un nuevo Blog, Casta y Bravura.
Son dos chavales muy jóvenes, tanto que podrían ser mis hijos. Uno de Valencia y el otro de Madrid.
A lo largo de este tiempo han estado alimentando este lugar con sus crónicas y sus comentarios.
A veces, me he fiado mas de lo que han contado aquí, que de lo que dicen en ciertos portales de internet.
Siempre han defendido la verdad.
Y son partidarios del Toro, Toro. Ese animal que pasta en las dehesas y que pocas veces vemos en los ruedos.
Además, siempre han defendido a los toreros de verdad. A aquellos que sienten su profesión y no están en esto para hacerse ricos.
Yo he aprendido mucho de ellos. Y a veces les envidio. Una envidia sana, ¿eh?
Porque a pesar de su juventud, demuestran su amor a este Arte que han vivido desde muy pequeños.
Sus obligaciones en la Universidad, quien pudiera volver a esa época, hace que hayan dejado algo abandonado este sitio.
Pero me consta que tienen mucha ilusión para seguir aquí al pie del cañón.
Es por eso, que desde mi humilde lugar de bloggera, me atrevo a usurpar hoy su blog para darles ánimos y para pedirles que sigan tal y como son.
Con esa frescura, con esa madurez, con esa ilusión. Esas cualidades que los que tenemos ya cierta edad, a veces perdemos.
Por eso, chicos, p’alante, que os echo de menos.
Amparo de Demediterráneoyoro.
Fabrice Torrito por J. Porcar
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Las despedidas bajo mi punto de vista son tristes y cada una de
estas tiene sus connotaciones. En este caso son de agradecimiento y
admiración...
Hace 1 semana
2 comentarios:
Perdón por usurpar este blog a los autores, pero quiero contestar a Amparo, que puede que sea una de las pocas personas que no sabe escribir con su mano, ni con ordenador, ni con bolígrafo, ni con estilográfica. Así es Amparo, pero en cambio tiene una facultad que cualquiera envidiaría, escribe con el corazón y eso es muy difícil, aunque los resultados están a la vista. Un saludo u ánimo a que sigáis con este blog, ahora más que nunca.
Que razón tienes Enrique.
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